domingo, 27 de marzo de 2011

No quiero dormir

No me quiero ir a dormir y darme cuenta de la soledad que me embarga...pero eventualmente debo afrontarlo. ¿Cuándo dos personas dejan de ser dos cuerpos y se convierten en un alma? ¿Cuándo la lejanía pasa de causar tristeza a causar dolor físico? es como que te arrancasen un pedazo, una mano de cuajo. La sensación de tener un caballo sentado en tu pecho no cesa. El aire no huele igual, tu esencia la percibo en todo, y esto solo aumenta mi miseria. No me quisiera imaginar una separación involuntaria. Pero debo irme a dormir y soñar que él está pensando en mí como yo en él.

lunes, 14 de marzo de 2011

Durmiendo en vida

Escribir? Yo no sé ya cómo escribir…se me olvidó, así como ya no recuerdo como volar en sueños.
Hace cuanto que un lápiz o bolígrafo no se alimenta directo de mi corazón y sangra sobre hojas rayadas destinadas para acciones más practicas?
No lo sé…Se me olvidó enamorarme también? Confesarle a la Hoja lo que mi cerebro entiende que mi corazón dice?
Acaso suspirar no es parte del horario laborar?
Se me olvidó como pararme en la calle y ver pasar una hoja y pensar que se ve hermosa cabalgando en el viento.
Ya no sé cómo decir sentimientos prohibidos con códigos secretos, como disfrazar acciones íntimas con las palabras más comunes, que sólo los seres que se han visto ahí, saben de qué les hablo.
Mis confidentes ya no recuerdan lo que es recitar poemas a escondidas…
Se me olvidó como amar a todo el mundo con locura, sin morir en el intento.
Ya no hablo con metáforas hermosas, rebuscadas, sólo para describir al sol por la mañana.
Ya no entiendo que es importante hacerle sonetos al mar por su poderío y presencia.
Ya los cuestionamientos profundos de la vida no llenan mi cabeza de preguntas.
Me estoy durmiendo en vida, y si no despierto pronto quizás no lo pueda volver a hacer.
Quiero que me despierten de esta pesadilla!